Una vergüenza es la que hace pasar Felipe Calderón a México, ya que mientras algunos gobiernos de Latinoamérica buscan unirse con respeto, sin tratados brutales como el TLC, con tratados de solidaridad en donde realmente la población sea beneficiada, Felipe va allá a decirles estupideces. Felipe Calderón es un insulto para Latinoamérica, para el planeta, y para la especie humana. Mientras algunos países latinoamericanos, hacen lo que pueden para combatir y protegerse de esos neocoloniales tratados de libre comercio, Calderón va para allá, y les grita que las cadenas de oro que carga en el cuello, siguen siendo lo último en moda.
Qué vergüenza tan grande he sentido, porque México no es nada de lo que pueda decir ese cavernícola.
Calderón ha dado a los medios de comunicación capitalistas, material para convertir una reunión que pretende tratar temas serios, en la cumbre del prehistórico y criminal libre comercio.
¡Ese es el Felipe títere del sistema!
Deniev Sentli
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